¿Eres una chica quejumbrosa?
Todas hemos tenido esa amiga que se queja por todo una y otra vez, a tal punto que hasta perdemos el interés por juntarnos con ella. ¡Todas las chicas del mundo tienen problemas! O ¿no? pero no por eso, debemos quejarnos todo el día, porque lo único que conseguiremos es mayor negatividad en nuestra vida.
La queja nace, a través de realizar cierta acción que no nos resultó como queríamos, sin embargo, si quizás dejáramos de quejarnos tanto por aquello que no funcionó y nos focalizáramos más en todo lo que tenemos para disfrutar y ser felices, no estaríamos tan amargados caminando por la vida.
¡La queja no sirve para nada más, que para hundirnos más en lo aguafiestas que podamos llegar a ser!
¿Qué hacer para dejar de ser una persona que se queja por todo?
- Deja de calificar todo: Tú no eres juez de nada ni de nadie, por lo tanto, lo más inteligente y sensato es tener la boca cerrada cuando no se te pide tu opinión. Además, antes de juzgar, mírate al espejo, tú tampoco eres perfecto.
- Siembra la aceptación en tu vida: La aceptación es un bálsamo para conseguir la paz interior y la salud mental. Si nos damos cuenta de que hay diversas situaciones, personas o hechos sobre los que no tenemos ningún poder y control, aprenderemos a dejar de tener esperanzas y a aceptar todo como viene.
- Adiós a los pensamientos negativos: Las palabras son el resultado de nuestros pensamientos, de lo que nos decimos a nosotros mismos. Si no logramos poder combatir las ideas negativas, caerás en el victimismo, las críticas y la queja continua. ¡Mal!
La clave está en lograr darnos cuenta de que muchas veces somos nosotros los que anticipamos, generalizamos y sobredimensionamos las cosas.
- Enfócate en lo positivo: Todo, pero absolutamente todo, tiene su lado bueno, pero nos cuesta tener la capacidad de fijar nuestra atención en todo lo bueno que tenemos a nuestro alrededor. Sí haces una tarea día a día, donde empieces a enumerar todo lo positivo que hay en tu vida, te darás cuenta de que hay más cosas agradables y buenas de las que te habías establecido. Dale la vuelta a eso que no te gusta y conviértelo en algo positivo.
Realiza diariamente estos consejos y verás cómo tu vida de a poco comenzará a cambiar ¡Empieza por aceptar tu vida tal y como es!