Lunares rojos: Causas, síntomas y tratamiento

Lunares rojos

Los lunares rojos, también conocidos como angiomas rubíes o hemangiomas, son una afección muy común de la piel. Se trata de pequeñas protuberancias rojas o moradas que se pueden encontrar en cualquier parte del cuerpo, pero con mayor frecuencia aparecen en el torso, los brazos y las piernas.

A pesar de que se denominan «lunares», en realidad no son lunares en el sentido clínico de la palabra, sino pequeños tumores que se desarrollan en los vasos sanguíneos de la capa superficial de la piel llamados capilares.

En la mayoría de los casos, los lunares rojos son inofensivos y no requieren tratamiento. Sin embargo, pueden ser preocupantes para algunas personas si aparecen en áreas visibles o si son muy grandes.

Además, es posible que estos lunares indican algún problema de salud subyacente, por lo que resulta importante conocer las causas, los síntomas y las opciones de tratamiento.

¿Por qué salen los lunares rojos?

La causa exacta de los lunares rojos no se conoce con certeza, aunque se ha demostrado que hay ciertos factores de riesgo asociados con su aparición. A continuación, se presentan algunas de las causas más comunes de los angiomas rubíes:

  • Envejecimiento: Los lunares rojos son más comunes en personas mayores de 30 años y suelen aumentar en número a medida que la edad avanza.
  • Genética: La predisposición genética también parece tener un papel importante en el desarrollo de los lunares rojos. Las personas con antecedentes familiares de este tipo de lunares tienen más probabilidades de desarrollarlos.
  • Exposición al sol: La exposición excesiva al sol puede dañar los vasos sanguíneos de la piel y provocar la aparición de lunares rojos.
  • Condiciones de salud: Algunos estudios sugieren que los cambios hormonales, ciertas enfermedades de la piel e infecciones virales también pueden causar la aparición de lunares rojos.
  • Embarazo: Durante el embarazo, los cambios hormonales y la expansión del volumen sanguíneo pueden causar la aparición de estos lunares.

Síntomas de los lunares rojos

Los lunares rojos son pequeñas protuberancias de color rojizo o morado que tienen un diámetro de 2 a 10 mm y que se pueden presentar aislados o agrupados. Estos lunares son indoloros y no causan comezón, sin embargo, pueden ser un problema estético para algunas personas, especialmente si se encuentran en áreas visibles del cuerpo.

Es posible que los lunares rojos se presenten de forma aislada o en grupos, y que cambien de tamaño con el tiempo. Los lunares rojos también pueden sangrar si se raspan o se golpean.

¿Hay que sacar los lunares rojos?

En la mayoría de los casos, los lunares rojos no representan ningún problema médico y no requieren tratamiento. Sin embargo, si se encuentran en áreas visibles del cuerpo o si causan molestia, pueden eliminarse con procedimientos médicos. A continuación se describen las opciones de tratamiento más comunes:

  • Electrocauterización: Este método utiliza una corriente eléctrica para cortar y sellar los vasos sanguíneos que alimentan al tumor, lo que hace que se reduzca de tamaño o desaparezca.
  • Criocirugía: La criocirugía utiliza nitrógeno líquido para congelar y destruir los lunares rojos.
  • Láser: Un láser emite una luz intensa que destruye los vasos sanguíneos, lo que hace que el lunar rojo se desvanezca.
  • Escisión quirúrgica: En algunos casos, los lunares rojos se pueden extirpar mediante cirugía. Este procedimiento consiste en extraer el tumor y luego cerrar la herida con puntos de sutura.

Es importante tener en cuenta que estos tratamientos pueden dejar cicatrices, y que algunos de ellos pueden requerir más de una sesión. Además, en raras ocasiones, los lunares rojos pueden volver a aparecer después de un procedimiento de eliminación.

Prevención de los lunares rojos

Aunque no existe una forma específica de prevenir la aparición de los lunares rojos, hay ciertos cambios en el estilo de vida que pueden reducir el riesgo de desarrollarlos.

Estos cambios incluyen limitar la exposición al sol, evitar la exposición a temperaturas extremas, llevar una dieta saludable y evitar los factores desencadenantes conocidos, como el alcohol y el tabaco.

Conclusión

Los lunares rojos son comunes y generalmente no representan un problema de salud serio. Sin embargo, puede resultar incómodo para algunas personas si aparecen en áreas visibles del cuerpo.

Aunque no existe una forma específica de prevenir su aparición, es posible que algunos cambios en el estilo de vida reduzcan el riesgo de desarrollarlos.

Si un lunar rojo provoca molestias o preocupa la apariencia, existen diferentes opciones de tratamiento disponibles para eliminarlo. Es importante hablar con un dermatólogo o un médico para evaluar la necesidad o el tipo de tratamiento.