Algunas personas pueden sentirse tan cohibidas por sus dientes torcidos que dejan de sonreír o evitan situaciones sociales.
Algunos problemas de salud que pueden causar los dientes torcidos incluyen:
- Enfermedad periodontal. Puede ser difícil de limpiar entre dientes torcidos. Esto puede provocar caries y enfermedades de las encías. Si no se trata, la enfermedad de las encías puede provocar periodontitis, una infección más grave que puede dañar los huesos y los dientes.
- Masticación y digestión. Los dientes torcidos también pueden interferir con la masticación adecuada, lo que puede causar problemas de digestión.
- Exceso de desgaste. Los dientes torcidos también pueden causar un desgaste excesivo en los dientes, las encías y los músculos de la mandíbula, lo que produce dientes rotos, tensión en la mandíbula, trastorno de la articulación temporomandibular y dolores de cabeza crónicos.
- Dificultades del habla. Si tus dientes están desalineados, pueden afectar la forma en que articula el sonido, causando problemas con el habla.
- Autoestima. La infelicidad con tu apariencia física puede conducir a una falta de autoestima y evitación social.
¿Deben enderezarse los dientes torcidos?
La decisión de enderezar los dientes es personal. Para muchos, la falta de fondos o seguro de salud dental puede afectar la decisión de enderezar los dientes. Los problemas de salud también pueden influir en una decisión.
Si tus dientes torcidos te hacen sentir cohibido, eso también puede ser una razón para enderezarlos. Pero recuerda, los dientes imperfectos pueden ser memorables y únicos.
¿Cuáles son tus opciones para enderezar los dientes?
Si has decidido que enderezar los dientes es la mejor opción para ti, hay varias alternativas que puedes discutir con un dentista u ortodoncista.
Los aparatos ortopédicos son una excelente opción para personas de cualquier edad, siempre que tus dientes y encías sean lo suficientemente fuertes como para sostenerlos. Los aparatos ortopédicos pueden ser una opción especialmente buena para los niños, que aún tienen encías y tejidos óseos maleables y flexibles.
El tratamiento puede durar entre dos y tres años, según el tipo de frenos que elijas y lo que necesites haber hecho. La cirugía para enderezar los dientes es otra opción a considerar, y generalmente toma menos tiempo para lograr los resultados deseados.