El puertorriqueño Bad Bunny ha decidido privatizar su cuenta de Instagram días después de tener un altercado con una fan, a la que tiró el móvil al mar cuando esta se encontraba grabándolo.
La decisión, que se ha producido en las últimas horas, ha pillado por sorpresa a sus seguidores.
Incidente viralizado en redes
Las imágenes de ese incidente se hicieron virales a los pocos minutos, pues fue grabado por varias cámaras y emitidas por muchos medios de comunicación.
Seguidamente, el artista se pronunció en sus redes sociales.
Advertencia
«Los que vengan a ponerme un teléfono en la cara lo consideraré como lo que es, una falta de respeto y así mismo los trataré yo», afirmó.
Tanto el propio altercado como las posteriores declaraciones de Bad Bunny lo colocaron en el punto de mira. Sobre él cayó una lluvia de críticas y sus grandes éxitos musicales también se vieron afectados, puesto que bajaron varios puestos en las listas de reproducción.
En el ojo mediático
Ante tal repercusión mediática, el puertorriqueño optó por borrar el tuit. Y ahora, días después, ha tomado otra decisión relacionada con sus redes sociales que precisamente puede provocar algún que otro disgusto a sus seguidores.
Otra advertencia
Bad Bunny ha puesto el candado a su cuenta de Instagram, pero lo más raro es que a su vez ha dejado en la biografía de su perfil de Twitter un mensaje un tanto enigmático. «Me van a extrañar», reza el espacio del artista.
Lo cierto es que aún se desconoce si estos pasos tienen que ver con el episodio de la fan o si se trata realmente de la promoción de un nuevo proyecto musical, puesto que Bad Bunny es propenso a crear tensión e incertidumbre cada vez que se dispone a lanzar un trabajo.