El simple hecho de no sacar a pasear al perro implica consecuencias que repercutirán en la salud, carácter y convivencia del animal.
Los expertos recomiendan que salgan a pasear diariamente o que realicen ejercicios. Por ellos, es importante que el propietario asuma responsablemente el bienestar de la mascota y esto implica llevarlo a recrearse.
Sacar a pasear a un perro no es lo mismo que simplemente sacarlo a la calle para que realice sus necesidades básicas y vuelva a casa.
Estas mascotas necesitan salir y realizar actividades que le permitan mantenerse en forma y además, compartir con el amo hace que unifiquen su vínculo.
Expertos afirman que compartir tiempo de calidad con el perro y realizar ejercicios es fundamental para que se desarrolle de manera correcta.
No sacarlo a pasear acarrea situaciones negativas en su comportamiento, seguridad, convivencia y salud.
El paseo de la mascota es una necesidad, ellos son por naturaleza inquietos, y están siempre desplazándose y explorando su entorno.
Muchos dueños de mascotas piensan que tener un patio o jardín es suficiente para que el perro esté feliz. Sin embargo, esto no es completamente cierto, el animal necesita estimulación y ejercicios diarios, y esto lo logra mediante el paseo.
Pasear al perro le lleva a explorar su entorno mediante sus sentidos, le proporciona la estimulación mental que lo mantiene activo, ya sea mediante el olfato, la vista, el oído, el tacto y el paladar.
Sacar a pasear al perro es necesario para que conozca cada día elementos nuevos, socialice, se ejercite y mejore su bienestar.
No sacarlos a pasear perjudica al can directamente en su salud física y mental, así como perjudica la convivencia con él en el hogar.
Si la mascota no sale a pasear fácilmente puede empezar a subir de peso de forma desmesurada, pues comerá más de lo necesario debido a la ansiedad o al aburrimiento y no quemará esas calorías extras, desembocando problemas como: la obesidad, diabetes, debilidad muscular, dolores de articulaciones.
Por otra parte, no cubrir las necesidades físicas del perro acabará afectando su carácter.
Estar encerrado sin poder cansarse, implica que el perro acaba con un exceso de energía que lo llevará a estar frustrado, aburrido y fácilmente alterable ante los estímulos excitantes, como objetos en movimiento, ruidos o, gente y perros paseando por la calle.
Además, el exceso de energía que no puede redirigir en ninguna actividad física al estar encerrado en casa puede llevarlo a desarrollar múltiples problemas de comportamiento.
Entre los más comunes se encuentran: ladridos, romper objetos, micción y defecación inadecuadas, comer de forma excesiva, agresividad, inseguridad y protección del territorio.
Es fundamental entender que si el perro tiene un problema de comportamiento derivado de la falta de ejercicio, no será suficiente reeducarlo para corregir la conducta.
Es necesario conocer si tiene su bienestar cubierto, es decir, se deben atender las necesidades esenciales de las mascotas.
Es de recordar que cada animal es único y, por este motivo, no existe una rutina que sea estandarizada a todos los perros, sino que dependiendo de factores como la raza, la edad o la condición física, cada perro tendrá sus necesidades específicas, las cuales es vital conocer.
Sin embargo, todos deben salir diariamente entre 2 o 3 veces distribuido a lo largo del día, dependiendo de la duración del paseo.
En cuanto al tiempo recomendado de paseo, este deberá ser entre 20 y 30 minutos dependiendo del número de paseos o, por circunstancias puntuales, solo puedes sacarlo como mínimo una vez al día, este deberá durar como mínimo una hora.