La complejidad que tenemos las mujeres en toda situación hace que seamos duras y rígidas con nosotras mismas, pero al mismo tiempo, solemos evitar hacer algo para cambiar ese escenario.
Es importante que tengas en cuenta que para lucir cómo quieres y deseas es de sumo valor tener determinación en tus actos como así también perseverancia.
¿A quién no le gustaría tener un cuerpo casi perfecto? Así es, casi. Si estás todo el tiempo buscando la perfección crearás problemas de salud. La perfección no existe y por eso es importante que te ajustes a lo que sería tu propia idea de belleza sin aferrarte a un modelo, simplemente a lo que te haga sentir bien con ti misma.
Ahora sí, veamos cuáles son los pasos para tener un cuerpo asombroso, pero también saludable.
- ALIMENTACIÓN: No te asustes, esto no significa que jamás podrás volver a probar esas hamburguesas tan ricas y, grasosas. Esto significa que durante el tiempo que te ejercites y empieces el round para lograr el cuerpo deseado, evites estos tipos de alimentos que contienen muchas calorías y que no son saludables tampoco.
- EJERCICIO: No le temas más a esta palabra porque de ahora en más se transformará en tu mejor aliada. Si nunca ha ejercitado es hora de comenzar a hacerlo. Empieza caminando, luego corriendo o andando en bicicleta regular y constantemente (todos los días a la siesta o a la noche o al mediodía, como a ti te quede mejor).
- ACTIVIDADES RUTINARIAS: Para ir acelerando el proceso es hora de que tengas en cuenta todo aquello que haces a diario y cambiarlo o incrementarlo para que te ayude en el proceso que estás atravesando.
Recuerda que este plan debes mantenerlo constantemente hasta que se te haga una rutina y puedas observar cambios en tu cuerpo. Es un estilo de vida saludable que puedes mantener por siempre.
Si tu cuerpo te duele o reconoces algún tipo de malestar, es importante que suspendas las actividades de abdominales y visites a un médico. Esto sólo te sucedería en el caso de que comiences a hacer todo de una vez, por eso es importante que reconozcas tus límites y puedas avanzar un poquito más cada vez.
IMPORTANTE. Ten paciencia. Esto no sucederá de un día para el otro. Mientras más ejercites más cerca estarás de tu meta así que ¡no decaigas!