Los pies tienen 26 huesos, 33 articulaciones, 19 músculos y más de 100 tendones y ligamentos. Es la porción terminal de una extremidad que lleva el peso del cuerpo y esta permite la locomoción y la retromoción.
Sin embargo, y a pesar de que se trata de una de las partes del cuerpo más delicadas, muchas veces se olvidan de ellos en su higiene y cuidado diarios.
Por ello, aquí te recomendamos cuidar esta extremidad de manera natural, ya que es importante dedicarle tiempo, para ayudarlos a mantenerse siempre impecable.
Hay consejos sencillos que se deben seguir para cuidar los pies.
En las noches se recomienda darle suaves masajes circulares con la yema de los dedos.
A la hora del baño se debe pasar la piedra pómez, para eliminar las células muertas.
En días agotadores, se sugiere sumergirlos durante 15 minutos en un recipiente con agua tibia con sal para aliviarlos.
Luego de la lucha si se está en la playa o la piscina, se debe secar bien entre los dedos, para evitar la aparición de hongos.
Una vez a la semana, es necesario aplicar una crema exfoliante y masajear suavemente, sin olvidar los talones. Para este proceso, se debe enjuagar con agua tibia para eliminar los restos de la crema, y secarlos nuevamente.
Se debe usar una crema hidratante y nutritiva.
Se deben colocar en alto alrededor de 20 minutos, para una total relajación.
Para evitar los hongos, que son causados por bacterias que se encuentras alojadas en lugares húmedos como el calzado y las medias.
Lo recomendables es usar vinagre de manzana para regular el pH en la piel y eliminar las bacterias.
Mezcla 5 cucharadas en u recipiente con agua caliente, y sumerge los pies durante 10 minutos.
En algunas ocasiones las uñas pueden causar molestias, ya sea por el uso de zapatos inapropiados, que aprietan, no se ajusten bien o por uñas que no han sido cortadas.
Se debe colocar los pies en agua caliente tres veces al día, solo por 10 minutos.
Masajear suavemente sobre la zona afectada (se puede aplicar aceite de oliva).
En un recipiente, agregar la borra del café y aceite de bebé. Aplicar una vez a la semana y retirarlo con agua tibia.
Mezclar una clara de huevo, ½ taza de harina de avena, tres cucharadas de jugo de limón, tres de leche, hasta lograr una consistencia espesa y aplicar. Retirar tras 5 minutos con agua tibia.
Este último tratamiento es para exfoliar e hidratar los pies.