Los talones agrietados, también conocidos como fisuras del talón, son una afección común del pie, que puede causar molestias o incluso dolor. Son el resultado de la piel seca y se acompañan de piel engrosada, más a veces callos amarillos o marrones alrededor del borde del talón.
A menudo, el único problema con los talones agrietados es su apariencia. Sin embargo, en algunos casos, la condición puede ser grave si las grietas se infectan.
Según la Evaluación Nacional de Salud de los Pies 2012, el 20 por ciento de los adultos han experimentado grietas en la piel de sus pies. Las mujeres tenían un 50 por ciento más de probabilidades de reportar la condición que los hombres.
Si las grietas en los talones son profundas, pueden ser dolorosas cuando una persona se pone de pie, y a veces pueden sangrar. Las personas deben consultar a un médico si experimentan dolor, enrojecimiento, hinchazón o dolor intenso en cualquier área del pie durante más de unos pocos días.
En este artículo, describimos algunos pasos que se pueden tomar en casa para tratar y prevenir talones agrietados en casos menores de la afección.
Los tratamientos hidratantes
En forma de cremas, lociones y ungüentos pueden ayudar a retener la humedad en la piel. Esto puede evitar que la piel se seque y se agriete. Los tratamientos hidratantes también pueden ayudar a reparar la piel que ya está agrietada.
En casos leves de talones agrietados, la hidratación dos o tres veces al día puede solucionar el problema. Frotar cualquier callo suavemente con una piedra pómez y aplicar una crema hidratante también puede ayudar. Sin embargo, tenga cuidado de no usar en exceso la piedra pómez, que puede empeorar los talones agrietados.
Usando un humectante emoliente o humectante
Los emolientes penetran en la piel y reducen la pérdida de agua. Llenan los espacios entre las escamas de la piel, lo que hace que la piel se sienta suave, suave y flexible. Ayudan a reducir la pérdida de agua en la piel.
Los humectantes penetran en la capa exterior de la piel, atraen el agua del aire y mantienen la humedad. También ayudan a aumentar la capacidad de agua de la piel.