Las mujeres tenemos tendencia a querer penetrar nuestros rostros de una manera óptima para que se vean reflejados como más lo deseamos.
Tener una cara cuadrada puede representar lo mejor o lo peor. Decimos esto porque si no eres capaz de reconocer cuál es la forma de tu cara, difícilmente podrás verte cómo quieres. Una cara cuadrada es muy fácil de reconocer. Está compuesta por un rostro ensanchado y todo el volumen principal se encuentra en la parte inferior de la misma por lo cual, lo principal es hacer que esa parte se refine incluyendo como objetivos principales los ángulos de la mandíbula como así también las mejillas. Tener una cara cuadrada hará que queramos desmarcar estas zonas para disimularlas.
Ya has reconocido tu cara por lo cual admite que eso ha sido un gran avance. Ahora prosigamos a entender la manera más conveniente para maquillar una cara de estas características.
– Como en todo maquillaje, lo primordial, será aplicar una base al rostro que sea acorde al tono de piel que poseemos. La base es lo principal ya que de acuerdo a ella el maquillaje se establecerá en el cutis. Hay que saber elegirla y aplicarla correctamente. Son sólo tres pasos que te permitirán lucir la base que luego será el pie para el resto de tu maquillaje: aplicar, difuminar y eliminar excesos.
– El siguiente paso será colocar un rubor en las mejillas y la forma en que será aplicado debe ser vertical ya que un rostro asimétrico tiene líneas horizontales y el colorete aplicado de esta manera le permitirá lucir menos esa zona. Le daremos una forma de triángulo invertido.
– Sigue uno de los pasos más importante ya que aquí es donde disminuiremos con un corrector la zona más marcada del rostro triangular que es el contorno que rodea a la mandíbula. Aplicaremos un polvo bronceador mate para desmarcar esta zona. Se coloca verticalmente, difuminándolo hacia la barbilla. También aplicaremos este polvo en la frente, más específicamente, en el nacimiento del pelo en forma triangular, sobre los contornos recorriendo hacia las sienes. Todo este proceso se hace con una brocha adecuada que permitirá crear el “óvalo” alrededor de tu cara de una manera que no se note el maquillaje y tu rostro se vea prácticamente, naturalmente afinado.
De esta forma, ya habremos suavizado de una manera correcta las zonas que queríamos ver menos pronunciadas logrando un rostro asimétrico correctamente maquillado.
TIP 1: Para tus labios procura no utilizar un color que sea muy fuerte ya que éste resaltará la parte inferior de tu cara donde se encuentran las zonas más voluminosas. Utiliza un color rosita. Sin embargo, si deseas verte más provocativa puedes aplicar un rojo que no sea tan potente.
TIP 2: En la nariz, puedes aplicar un polvo compacto mate un tono más oscuro que el aplicado en los contornos de tu mandíbula. Esto logrará simular un rostro ovalado.
TIP 3: En tus ojos, utiliza una sombra que los resalte, puede ser negra o violeta. Así, se creará profundidad en los ojos y la atención estará allí.