Existe una percepción errónea común de que solo los hombres dejan de lado a sus parejas y que las mujeres son siempre fieles. A eso digo: ¿con quién engañan exactamente a todos estos hombres? ¿Los hombres heterosexuales solo engañan con mujeres solteras y entre sí? ¿Por qué una mujer es infiel?
La simple verdad es que aproximadamente tantas mujeres heterosexuales casadas engañan como los hombres heterosexuales casados. Las investigaciones sugieren que del 10 al 20 por ciento de los hombres y mujeres en matrimonios u otras relaciones comprometidas (monógamas) participarán activamente en actividades sexuales fuera de su relación principal.
Y es probable que estos números no se reporten, posiblemente por un amplio margen, gracias a la negación y la confusión sobre lo que constituye la infidelidad en la era digital. Por ejemplo: ¿Estás haciendo trampa si miras porno? ¿Si coqueteas en las redes sociales? ¿Si tienes un perfil en Tinder que revisas regularmente, a pesar de que nunca te conecta en persona?
Para ayudar a las parejas a responder estas preguntas, les ofrezco mi definición completamente funcional de la era digital de lo que significa ser infiel:
La infidelidad (trampa) es la ruptura de la confianza que ocurre cuando guardas secretos profundos y significativos de un socio principal comprometido.
Me gusta esta definición por cuatro razones principales:
1. La definición habla del elemento más básico de lo que sucede cuando engañamos a nuestros socios. Traicionamos su confianza. En tales casos, incluso más que nuestra actividad sexual transcurricular, es la mentira y el secreto de la traición lo que hiere a una pareja amada y desconocida (hombre o mujer).
2. La definición abarca tanto la actividad sexual en línea como en el mundo real, así como las actividades sexuales y románticas que no llegan a tener relaciones sexuales: todo, desde mirar pornografía hasta besar a otro hombre / mujer o algo tan simple como coquetear (ahora comúnmente conocido como micro infidelidad).
3. La definición es flexible dependiendo de la pareja. Permite a las parejas definir su propia versión de fidelidad sexual basada en discusiones honestas y en la toma de decisiones mutuas. Esto significa que podría estar bien mirar pornografía o participar en alguna otra forma de actividad sexual extramarital, siempre y cuando tu pareja conozca este comportamiento y esté de acuerdo.
4. La definición ayuda al infiel a comprender que el problema que él o ella creó ocurrió en el momento en que comenzó a mentir para acomodar o encubrir su infidelidad. El daño no es que un cónyuge descubra las malas noticias, sino que fue encubierto.